Vida y obra de un pasaporte 2004 – 2009
La semana pasada fui a renovar mi pasaporte y al ir a echarme la mano al bolsillo para pagar los eurillos pertinentes me encontré con esta carta manuscrita, os la transcribo:
Querido Rodrigo:
Soy tu pasaporte, juntos hemos pasado buenos momentos y me gustaría rememorarlos antes de que acabe mi ciclo de vida de 5 años, encantó disfrutar de este tiempo viajando contigo. Sin más te cuento las cosas conforme a yo las recuerdo:
Cuando nací hacía mucho calor, era Madrid en Agosto, me necesitabas para hacer un viaje por Japón, todavía recuerdo tu ilusión por este viaje. Me contaste que estuviste ahorrando durante un año todo tu dinero e incluso fuiste durante un mes a clases de japonés para poder defenderte mejor. La primera vez que me utilizaste fue para comprar el billete del Japan Rail Pass, si ese billete con el cual podías coger durante una semana todos los trenes en Japón. En Septiembre recuerdo perfectamente que me mirabas mucho y un día me metiste en un bolsillo y no dejabas de sacarme de vez en comprobando que no hubiera saltado de tu bolsillo. Tras unas cuantas horas de nervios dentro de un agobiante avión donde hicimos lo posible por hacer pasar el tiempo lo más rápido posible.
Una vez en Tokyo con un poco de nervios perdi la virginidad, sin muchas preguntas me pusieron una pegatina con un código y me graparon un papel a modo de piercing, que desilusión me esperaba un sello de tinta. Luego decidiste que para que no me perdiera era mejor no andar paseando conmigo por ahí, así que me dejaste en la maleta, en casa. Mal hecho porque ese día tuviste que dar explicaciones a un policía. Con más tristeza volvimos para España.
Allí me dejaste aparcado un tiempo, es verdad que me llevabas a tus viajes por Italia, Alemania, Reino Unido… pero siempre era un segundo plato, siempre tenías al señor DNI más pequeño y manejable, maldito… Pero al cabo del tiempo llego mi momento, un viaje donde el no podía llevarte, a Sudamérica!
De momento volvieron los nervios, el comprobarme que estaba todo en regla y demás. Una noche me chaste en el bolsillo y salimos para el aeropuerto con destino a Buenos Aires, tras una noche de más debido al overbooking y con 600 euros más gracias a la indemnización fuimos para allá, esta vez con menos nervios y es que la experiencia es un grado. Nos preguntaron mucho menos al llegar a Buenos Aires, casi automáticamente nos pusieron un sello, si, por fin! un sello de tinta! A partir de aquí comenzó un periplo por todo Argentina donde siempre me llevabas muy cerca, era uno de tus bienes más preciados. Al día siguiente me llevastéis a Iguazú, donde me necesitasteis para cruzar al lado Brasileiro, fue rápido pero muy bonito, ¿verdad?. Tras un par de semanas o así recorriendo por tierra Argentina llegamos a la frontera con Chile. Allí te revisaron tu mochila y no tenías nada sospechoso, no así tu primo que tenía algo ilegal… una manzana! Tras pagar la consiguiente multa con la cual hubieráis cenado los tres y con el sello ya puesto en mi, continuamos el viaje con 1 hora de retraso por el incidente.
Luego me llevastéis a la montaña a caminar por ahí en busqueda de los glaciares. Aun recuerdo cuando me olvidaste dentro de unos pantalones fuera de la tienda, se tiro toda la noche lloviendo y con un viento infernal. Por suerte pude agarrarme fuerte y no volarme, pero estaba totalmente calado. Tras todo el día secándome consegui un estado aceptable, de hecho mucho mejor de lo que podría esperarse. Después volvimos a Argentina para ir a la Isla de Fuego, Usuaia, wow! aquello fue increíble. Allí me volviste a necesitar para coger un vuelo a Buenos Aires y a los dos días volver a España.
Después de esto me volviste a tener de segundo plato, hiciste muchos vuelos entre Dublín y Madrid pero solo era un acompañante de seguridad, de nuevo el DNI fue tu amigo. Por eso decidí huir, no soportaba la idea de que me quedaban menos de 3 meses de vida y por tanto era inservible, decidí escabullirme entre tus cosas de la mudanza, me encontrarás algún día tras un tiempo, un cadaver perfectamente conservado al que mirarás con cariño.
Mi nuevo sustituto parece que tendrá mucho trabajo, esta semana a Turquía y en Septiembre para Japón, parece que dentro de 5 años el también tendrá muchas que contar, una lástima no poder estar aquí para vivirlas contigo. Fue genial pasar estos años contigo Rodrigo, no me olvides, yo siempre fui y seré tu primer Pasaporte.
Un abrazo.
Wow, me ha dejado de piedra 😉