
Hoy en mi escuela, KAI school, teníamos una clase especial a la que llaman open class. En este día se acerca gente de fuera de la escuela a darnos una clase sobre algún aspecto. No obstante no voy a hablar de esto porque lo haré en el siguiente post, hoy solo quiero hablar de una parte de este día y es que comí cocina «cocinada» en nitrógeno líquido. Resulta que vino un profesor de la universidad una universidad japonesa para hacer lo que el llamaba «magia científica». En realidad nos mostró muchas varias cosas relacionadas con el magnetismo que parece que son su especialidad, además de ser un friki de cuidado. Pero de eso hablaré más adelante. Hoy hablemos de esta comida criogenizada.

Resulta que la gente que trabaja con magnetismo esta familiarizada con el uso de nitrógeno líquido. No soy experto en la materia pero creo que el nitrógeno líquido por lo que le entendí esta a algo así como -100 grados bajo cero. Al calentarse se convierte a estado gaseoso, es por tanto excelente para enfriar cosas y a bajas temperaturas tengo entendido que el magnetismo es mucho mayor. Pero no voy a hablar de lo que no se, tan solo de lo que si, y es que este hombre nos hizo pasar una hora apasionante. Desde luego es un gran divulgador.
Tras darnos su charla para nada aburrida sacó su extraño set de cocina, consistente en unos boles y una gran botella llena de nitrógeno líquido. Dentro de los boles comenzó a poner ganchitos y chucherias que posteriormente congelaba y después nos daba a probar. Lo cierto es que con los primeros masmallows (nubes de algodón) estabamos un poco acongojados todos y mi compañero Victor que fue el primero en probarlo puso una cara rara que nos dio a pensar que era posible que muriese en el acto.



Por suerte no fue así y todos lo fuimos probando. La sensación desde luego es rara esta totalmente duro, pero supongo que este enfriamiento tan rápido y tan rápido hace que la estructura del producto cambie y es que se vuelve super fragil. Al dejar caer el masmellow (o como quiera que se escriba) en el plato este tenía bastantes posibilidades de romperse en pedacitos, justo como ocurré con los malos en las películas una vez congelados o con este portátil que un profesor de la universidad sacrificó.


Después vinieron tubos gigantes de ganchitos que usabamos como lanzadores de niebla o chocolate criogenizado en honor a Naito-sensei un super fan del chocolate. Os aseguro que era realmente impresionante verlo en directo y las caras de sorpresa que teníamos eran totalmente auténticas. Poco a poco toda la escuela, tanto alumnos como profesores se fueron congregando alrededor de este peculiar personaje y disfrutamos muchísmo del momento. Os dejo un vídeo con algunos momentos:
Comida cocinada con nitrógeno from Rodrigo Fernandez on Vimeo.
También podéis ver algunas fotos más del evento en cuestión en su galería de flickr.
jeje, en Cortegana ya te vendían nubes congeladas 😉
Mola!
Si, me acuerdo de eso, pero de verdad que esto no tenía nada que ver. Las nubes que comprábamos aunque estaban duras porque estaban congeladas seguian siendo gomosas, pero estas estaban tan duras y así como secas que se rompía en pedazos dentro de la boca! Era curioso 🙂
Que bueno ^^ el puro de nitrógeno XD
Si jajaja era genial, me lo he pasado como un jodido enano de verdad! me he sentido como un niño cuando te descubren algo tan nuevo para uno, es genial sentirse asi de niño de vez en cuando 🙂
¡qué divertido! ¿pero estaba frío al comerlo?
Si si estaba congelado!
Yo he comido cosas cocinadas en nitrogeno y lo mas impresionante fue una crema de guisantes , quedo como una yema de huevo ,estaba con una pelicula resistente en el exterior y liquida por dentro.
Muy curioso.
ciaooo
Eso lo hacia Ferran Adriá no?
po si
Y de el lo probasté? no sabía que habías comido en el Bulli!
Mola mil y se ve en la cara de todos los presentes. Por cierto que tan costoso será el nitrogeno liquido, la sesión de cocina saldría barata?
Creo haber entendido al tipo este que no sale excesivamente caro, pero eso lo estaba hablando con una profesora entonces como hablaban entre japoneses subió el ritmo y la dificultad de su japo y no lo entendí muy bien… Pero parece ser que no es demasiado caro… Yo pienso que quizá lo más caro sea el contenedor para mantener eso, además de que no debe ser fácil conseguirlo.
Y en cuanto a lo de las caras si… es lo que más me gusta, si bien las fotos de estos «experimentos» molan las caras me encantan NUNCA había conseguido retratar estas caras de asombro que parecen de niños en tantas personas adultas, estoy super contento con ello y me ha hecho querer retomar mi faceta de fotografo más retratista que en su día me llamó tanto la atención 🙂
qué chuloooooooooooooooooo!!!! 😀
😉 tienes que decirle a tu madre que lo ponga en práctica! si lo hace el Adriá tu madre no va a ser menos 😉
hombreeeee está claro!! quien sabe alomejor en tu próximo cumple por aquí te hace una tarta criogenizada 😛
Jaja, molaría 🙂
Te queria haber contestado cuando vi el post pero alli no pude T_T
FUE CHULISIMOOOOOOOOOOOO!!! Aunque la nube daba un poco de grima xDDD
Pero el umaibo estaba geniaaaaal!
Grima? a mi ninguna jeje, me gustaba 🙂
Que bueno eso me servira para mi trabajo de biologia
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