Cualquiera que me conoce sabe que soy un gran aficionado a las series, en su gran mayoría a las americanas, tengo cierta afición a las series japonesas y a veces intento ver las series españolas. Lo cierto es que con las españolas casi nunca encuentro nada que me guste y aunque me tragué dos veces «Compañeros» o «Médico de familia», pero lo cierto es que me parecen bastante regulares y de andar por casa. Pero hay una serie española que a mi entender destaca, y por mucho, en el panorama seriéfilo español, esta es «Crematorio». Pero aunque lo parezca no quiero hablaros de esto hoy si no de la serie Aida.
Aida es una continuación de la serie 7 vidas, una serie que comenzó con un personaje que despertaba de un coma tras 7 años (o algo así) y que contaba su vida tras ese tiempo desconectado de la realidad. En seguida vieron que esa trama, ese personaje y ese actor no daban para mucho, pero que todo lo demás si. Yo no vi demasiado y salvo Javier Cámara, lo demás no me interesaba demasiado. En esta serie el personaje que terminó calando más fue el de la vecina Aida, hasta tal punto que terminó teniendo un «spin off» con una serie con ella como protagonista.
Nunca he visto ni un solo capítulo de esta serie, mas del tiempo que se tarda en hacer un zapping de ritmo pausado en una noche de insomnio, quizá sean 1 o 2 minutos lo máximo que he visto seguido de la serie. Vaya por delante que no es un humor que me guste demasiado, pero que no puedo profundizar en el porque no lo he visto demasiado. Podría decirse que es un humor canalla, una suerte de humor negro donde no deja títere con cabeza y no hay tema del que no se pueda hacer humor. A mi personalmente siempre me pareció mas un humor casposo, pero será cuestión de gustos…
A mis ojos y oídos ha venido a parar un trozo de uno de los capítulos ya que esta teniendo cierta repercusión por el territorio japonés, sobre todo en círculos de personas relacionadas de alguna forma con España, luego os cuento por que. Antes os dejo un enlace al vídeo en cuestión:
La escena de Aida con el chino
Por lo visto hay un personaje llamado Mauricio que es un racista exagerado, tan exagerado que llega a ser cómico, o al menos eso es lo que parecen pretender, porque a mi mucha gracia no me hace. En su bar parece que tiene un trabajador de origen sur/centro americano al que «cariñosamente» se refiere como «Machu» y al que le dice que lea algo y se ríe diciendo: «Mira un mono leyendo», no llevaba ni 30 segundos de vídeo y ya tenía los ojos como platos. La atención pasa a centrarse en un personaje llamado Wang, que llega para abrir un negocio. Para interactuar con él, Mauricio se pone unos guantes ya que no quiere tocarle directamente, porque comen gato. Todo esta lleno de los típicos tópicos de la forma de hablar de los chinos y del clásico de pronunciar la R como L. Ya hacia el final podemos ver un cartel en el que dice prohibido perros y chinos.
Vale, que es una serie de ficción, en la que se crea un personaje absurdamente racista, tan absurdo que da risa y por tanto se hace humor. Una suerte de Torrente, el humor que tanto triunfo en nuestras fronteras e incluso fuera de ellas (En Argentina son grandísimos fans de esta película). El problema es que Torrente es por encima de todo una crítica de estos personajes, es un personaje que crea la más absoluta repugnancia y que es a todas luces un antihéroe. Un personaje al que quieres de alguna forma por su estupidez. Mauricio por otro lado es más un personaje que nos recuerda al viejo anacrónico que nos encontramos casi a diario paseando por las calles de nuestra ciudad. Quizá no sea común ver personajes tan descarados o exagerados, pero todos tenemos historias donde hemos visto un racismo claro.
Personalmente creo que este humor fomenta el racismo, lo naturaliza y normaliza, aborrezco este humor y a este personaje y me escandaliza que se emite en un horario infantil donde mentes todavía no formadas son mas propicias a malinterpretar esta situación de humor con risas enlatadas y que pueden pensar que hacer chascarrillos racistas es lo mas divertido del momento.
Resulta que el actor que da vida al señor Wang es un actor japonés, que esto llego a los foros de japoneses en España y que les llego muy a dentro esto de «prohibido perros y chinos». En España cuando el común de los mortales habla de un chino se esta refiriendo desde un Coreano, a un Japonés pasando por Chinos y depende de lo «achinados» que sea incluso un Filipino. «Achinado» otra expresión terrible, porque si decimos ojos achinados no decimos mejor ojos rasgados?
Como sabréis vivo en Japón, voy camino de mi quinto año por aquí y Japón no es un país exento de racismo, de hecho muchas veces es famoso por ello, pero en mis 5 años nunca he tenido ninguna experiencia similar a alguna de las que mi novia (japonesa) ha tenido durante 5 años viviendo en España, un país en el que nos consideramos abiertos a diferentes culturas y nada racistas.
A mi novia la han gritado CHINA!! en varias ocasiones por el simple hecho de ser asiática y de pasear por la calle (esta claro que para estos individuos el término es un insulto), han llegado incluso a escupirla por la calle y a intentar quitarla el turno en correos porque ella era menos que un español (española en este caso). Cualquier historia de un expatriado en Japón no se acercará ni de lejos a esta y suelen quedarse en que han usado el termino gaijin (extranjero o más literalmente persona de fuera) de forma despectiva o una queja similar. Si nos pasase algo similar a lo que un asiático ha de vivir en España tendríamos el grito en el cielo.
Y para terminar series o películas con un humor negro pero con mucho mas acierto son Torrente o la americana South Park, pero ambas tienen claras el ser productos para adultos, se catalogan como tal y se emiten en franjas horarias acordes a ello. Aida es una serie para todos los públicos que da mensajes que a mi entender totalmente inaceptables. Quizá lo este entendiendo todo mal y queráis darme vuestra opinión al respecto, para eso tenéis los comentarios donde estaré encantado de leer vuestra opinión. Si habéis llegado hasta aquí gracias por tragaros este tocho 😉