Como ya os apuntaba el otro día me marqué una escapada con el Shinkansen. La razón de esto es aprovechar un billete especial llamado JR east pass que estaba de oferta y que además podía comprarlo desde dentro de Japón. El único requisito era tener visado de visitante temporal y yo de momento lo cumplo. Así que aproveche y me saqué 3 días de Shinkansen por 10.000 yenes, unos 75 euros. La clave es que no tienen porque ser consecutivos estos días. Así que me escapé el domingo y lo volveré a hacer el finde que viene 🙂
El destino elegido fue Niigata. La razón, pues no se, porque esta más o menos lejos y era un lugar que si no tenía esta oferta de billete no creo que fuera a visitar de otra forma. Y es que el billete de ida y vuelta a esta ciudad que yo reservé costaba 20 mil yenes y yo lo tenía incluido dentro de los 10mil yenes los tres días. Pero sin liarme, paso a contaros la visita y a enseñaros las fotos, que esta vez estoy bastante contento con el resultado obtenido.
Este tren a vapor fue lo primero que me encontré al bajar de mi Shinkansen, me hizo una ilusión tremenda verlo, era una máquina increíble, detrás tenía su vagón de carbón y tal. Me dieron ganas de montarme en el, pero decidí quedarme por la ciudad.
Si me hubiera montado, hubiera ido dentro de este vagón, bastante cuco la verdad.
Gracias a que no fui, pude ver templos rodeados de árboles tan increíblemente bonitos, como este de arriba. Encabezando el post podéis ver el mismo árbol con el templo al lado una de mis fotos preferidas del día.
Y de gatos de templo tan majetes como este. Y es que por alguna extraña razón, en todos los templos que iba había gatos. Supongo que lo que sucede es que la gente les da de comer aquí 😉
Aquí el mismo templo encuadrado en un tori de piedra. Si bien no soy mucho de templos los pequeñitos de esta ciudad me encantaron porque estaban vacios y fueron un lugar muy interesante donde reflexionar rodeado de mucha paz.
También me entretuve haciendo fotos a las luces y a los colores de las hojas, y es que esto de viajar solo da mucho pie a dedicar el tiempo que quieres a las cosas que quieres.
Lo dicho más pruebas de fotos, aquí andaba aprendiendo a usar el enfoque bien.
Este viaje lo hice sin guía y fue una sucesión tras otra de ir yendo a sitios que me parecían interesantes. De esta forma llegué a las orillas de un río rodeado de árboles con las hojas de color fuego que sin lugar a dudas fue el mejor momento del viaje. Aproveché para hacer muchas fotos y probar muchas cosas y también para sentarme a desayunar en un banquito mirando al río.
Los colores de las hojas me parecían espectaculares.
También las casas de los lados eran alucinantes, todas tradicionales con tejados geniales con los de las películas y este en partícular con un tejado de un azúl muy vivo.
Visite más templos pequeños pero alucinantes y habitados por absolutamente nadie, como mucho por uno o dos dioses y con su permiso me dedique a hacer fotos sin parar.
Y entre todas las que hice algunas me gustaron como quedaron. Ya me voy sintiendo más cómodo con la cámara.
De ahí me fui a otro templo más grande, pero seguía solo, así que continué aprovechando y haciendo fotos sin parar.
Esta es una de las que más me molan también, sin tener mucha idea creo que la composición no es del todo mala y se me hace agradable verla.
Podéis ver más fotos en su galería de flickr.
El resto del día lo pasé más metido en la ciudad que ya no tenía mucho interés y donde no encontré nada que me llamase la atención para fotografiarlo. Lo único así interesante que encontré fue un mercado natural al lado de uno de los grandes ríos de la ciudad donde aproveche a comprar algo de dulces para llevar a Hiroko de regalo de viaje, o de Omiyage como le dicen por aquí.
En definitiva un viaje que disfruté mucho, lo pasé muy bien, hubo una luz suave y muy bonita y aprendí mucho de la cámara y de las fotos. Si volviera al pasado lo volvería a hacer, pero si no tuviera esta oferta y tuviera que pagar los 20mil yenes que cuesta ir regulamente lo tendría claro y me quedaría por Tokyo o visitaría algo más cercano.
Pues eso, espero que os hayan gustado las fotos. A ver si mañana saco otro rato y os saco otro post con más fotos otoñales que tengo aún en la recamara.
El gato de la foto está pensando
«Aqui niigata ni ná, copón!!»
I know I know, by the segao is the way…
bonitas fotos!!!!!!!!! 😀 Reflexionando en los templos llenos de paz, eh? ¿Estás pensando en convertirte al budismo? 😉
Si, muy bonitas. No sé si será por lo que cuentas pero hasta las fotos inspiran paz y sosiego.
@Tosca otra columpiada como esa y te baneo del blog 😛
@Pal no es mala religión… pero sigue siendo el opio del pueblo 😛
@Marisa desde luego la ciudad tenía lugares muy tranquilotes 🙂
🙂 están muy bien los viajecitos así solos en los que estar un poco tranquili haciendo fotos de vez en cuando.
No recuerdo la última vez que he hecho fotos tranquilo XD
te estas convirtiendo un poquito zen.
las fotos muy bonitas.
ciaoo
Hola te queria felicitar por este excelente blog, les dejo el mio http://gratisparatucasa.blogspot.com/ es de freebies, un freebie es un regalo de algunas webs, los regalos pueden ser libros, revistas, chocolates, juegos, todo lo que se te ocurra.. lo regalan, yo recopilo esos freebies, la invitacion esta hecha http://gratisparatucasa.blogspot.com/ , y mas que nada felcitarte por este blog
muy interesante el blog, felicidades.
sobre lo del JR East Pass, que por eso es por lo que te escribo aquí, si aún no lo has gastado, esta es mi recomendación, Matsushima, está cerca (un poquito menos que Niigata, unas 2 horas y media) y es realmente bonito, tanto las islas como los templos. Así que eso, que disfrutes tu año por allí.
Y ahora a leerme el blog desde el principio 🙂
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